Entre las cosas que me pierdo en enero es el seguimiento de las noticias sociales y eclesiales. Y con el viaje al Machu Picchu, mucho más. Al regresar, las noticias me llegan acumuladas en el correo electrónico no leído. Algunas cosas las repaso, muchas van a la papelera sin ninguna mirada.
Por esto quedé fuera de contexto con lo del levantamiento de la excomunión a los cuatro obispos lefebristas. Y no entendía nada de lo que pasaba al ver la noticia de que uno negaba la realidad de los campos de exterminio nazi.
Pero mucho menos entiendo noticias estúpidas como esta, de periodistas que no entienden nada del tema, pero que tienen que llenar espacios dentro de una línea editorial llenas de estereotipos.
Hoy la Santa Sede ha dado a conocer un comunicado, a través de la Secretaría de Estado del Vaticano. Como seguramente será ignorado por los “defensores de la verdad frente al oscurantismo medieval”, como es costumbre, se los transcribo (las negritas son mías). En el se aclara que los lefebristas todavía no son católicos, ya que para serlo deberán aceptar el Magisterio del Concilio y de los Sumos Pontífices posteriores a Pío XII. También le pide a Williamson que rectifique sus afirmaciones sobre la Shoá, las cuales son absolutamente inaceptables y firmemente rechazadas por el Santo Padre.
Ah… me olvidaba: el título es irónico y marquetinero. Por eso está entre comillas. Aclaro para que no me relacionen con las afirmaciones desdichadas de ese obispo re-comulgado.
Nota de la Secretaría de Estado
A raíz de las reacciones suscitadas por el reciente Decreto de la Congregación para los Obispos, con el que se levanta la excomunión a los cuatro prelados de la Fraternidad San Pío X, y en relación a las declaraciones negacionistas o reduccionistas de la Shoá por parte del obispo Williamson de dicha Fraternidad, se considera oportuno aclarar algunos aspectos de la cuestión.
1. Remisión de la excomunión.
Como ya ha sido publicado con precedencia, el Decreto de la Congregación para los Obispos, dado el 21 de enero de 2009, ha sido un acto con el que el Santo Padre salía benignamente al encuentro de las reiteradas peticiones por parte del Superior General de la Fraternidad San Pío X.
Su Santidad ha querido quitar un impedimento que perjudicaba la apertura de una puerta al diálogo. Ahora espera que la misma disponibilidad sea expresada por los cuatro obispos en total adhesión a la doctrina y a la disciplina de la Iglesia.
La gravísima pena de la excomunión latae sententiae, en la que dichos obispos habían incurrido el 30 de junio de 1988, declarada después formalmente el 1 de julio del mismo año, era una consecuencia de su ordenación ilegítima por parte de monseñor Marcel Lefebvre.
El levantamiento de la excomunión ha liberado a los cuatro obispos de una pena canónica gravísima, pero no ha cambiado la situación jurídica de la Fraternidad San Pío X, que por el momento no goza de reconocimiento alguno en la Iglesia católica. Tampoco los cuatro obispos, aunque liberados de la excomunión, tienen una función canónica en la Iglesia y no ejercen lícitamente un ministerio en ella.
2. Tradición, doctrina y Concilio Vaticano II.
Para un futuro reconocimiento de la Fraternidad San Pío X es condición indispensable el reconocimiento pleno del Concilio Vaticano II y del Magisterio de los Papas Juan XXIII, Pablo VI, Juan Pablo I, Juan Pablo II y del propio Benedicto XVI.
Como ya se ha afirmado en el Decreto del 21 de enero de 2009, la Santa Sede no dejará, en los modos que juzgue oportunos, de profundizar con los interesados en las cuestiones aún abiertas, de modo que se pueda llegar a una plena y satisfactoria solución de los problemas que han dado origen a esta dolorosa fractura.
3. Declaraciones sobre la Shoá.
Las posturas de monseñor Williamson sobre la Shoá son absolutamente inaceptables y firmemente rechazadas por el Santo Padre, como él mismo ha recordado el 28 de enero pasado, cuando, refiriéndose a aquel salvaje genocidio, reafirmó su plena e indiscutible solidaridad con nuestros hermanos destinatarios de la Primera Alianza, y afirmó que la memoria de aquel terrible genocidio debe inducir a "la humanidad a reflexionar sobre el poder imprevisible del mal cuando conquista el corazón del hombre", añadiendo que la Shoá permanece "para todos como advertencia contra el olvido, contra la negación o el reduccionismo, porque la violencia hecha contra un solo ser humano es violencia contra todos".
El obispo Williamson, para ser admitido a las funciones episcopales en la Iglesia, deberá también tomar de modo absolutamente inequívoco y público distancias a sus posturas sobre la Shoá, desconocidas por el Santo Padre en el momento de la remisión de la excomunión.
El Santo Padre pide el acompañamiento en la oración de todos los fieles, para que el Señor ilumine el camino de la Iglesia. Que crezca el empeño de los pastores y de todos los fieles en apoyo de la delicada y pesada misión del sucesor del apóstol Pedro como "guardián de la unidad" de la Iglesia.
En el Vaticano, a 4 de febrero de 2009
Estimadísimo Padre:
Dados los incontables ataques que están sufriendo la Iglesia y el Santo Padre, unidos a una catarata de desinformación (como ud. bien señala), me parece que hay que ser más cuidadoso con los términos.
Ud. dice "los lefebvristas todavía no son católicos" y eso es falso.
Los lefebvristas, como tales, siempre fueron católicos, los sacramentos celebrados por ellos también (salvo los que requieren jurisdicción como la confesión y el matrimonio) y hasta tenían arreglos puntuales en alguna parroquia.
Los únicos excomulgados eran los cuatro obispos ordenados sin autorización y sus ordenantes.
Podríamos discutir si la excomunión como tal los privaría del status de católicos pero es indudable que removida estas, aún para los obispos, su catolicidad no puede ser negada.
La falta de regularidad canónica no debe confundirse con su no catolicidad.
Respetos, estimado padre.
Natalio
¡Hola, Padre!:
Puedo asegurarle que los medios de comunicación no siempre se preocupan por informar y sí siempre se preocupan por vender más.
En una clase de gráfica, cuando estudiaba Comunicación Social, una profesora nos enseñaba la manera de impactar con el título y no tuvo mejor idea que realizar un ejemplo con un artículo sacado de AICA. Con unos pocos cambios, no sólo creó un título impactante, sino que, además, le cambió el sentido.
Cuando escuchó mis reclamos, justificó su acción de mil maneras y dejó a criterio del autor de cada artículo la responsabilidad de sus dichos, deslindándose de toda responsabilidad ética.
Gracias a Dios, no todos los profesores tienen tan pocos escrúpulos. Pero con uno solo, salen periodistas sin ética y amarillistas.
Por mi parte, aunque no entienda, sigo creyendo y sigo amando a la Iglesia, por eso la respeto y espero a que las cosas se aclaren antes de emitir mi opinión.
¡Dios lo bendiga abundantemente!
Natalio: nunca me ha alegrado que la túnica de Cristo se desgarre. Por eso trato de rezar con frecuencia en la Misa la plegaria V-d, que pide por la unidad.
Lo que voy a decir, con todo el respeto que me merecen tus opciones, que conozco de seguir tu blog.
Un ejemplo para ilustrar. Uno que conoce, por la confesión o la dirección espiritual, la vida "hacia adentro" de muchos matrimonios no se sorprende cuando estos se separan. Lo que para algunos, que solamente ven lo exterior, es algo imposible de creer, no lo es para quién conoce las desaveniencias y las opciones en contra de una armoniosa unión conyugal.
Es difícil precisar el momento exacto en que Lutero o los Viejos Católicos dejaron la comunión eclesial. Pero con certeza fue mucho antes de ese acto concreto e histórico que marcó el rompimiento.
Cuando uno lee los contenidos de los blog de inspiración lefebvrista, no sabe (y esto para matizar la afirmación que me cuestionaste) si están fuera de la Iglesia o no (como en el ejemplo del matrimonio antes de la ruptura formal). Muchos opinan que con ellos hay que hacer dialogo ecuménico, como con los Protestantes.
Más allá de esto, si están en comunión plena con la Iglesia, esta es una comunión muy endeble. No lo digo yo, sino el comunicado que transcribí. Cito: "no ha cambiado la situación jurídica de la Fraternidad San Pío X, que por el momento no goza de reconocimiento alguno en la Iglesia católica". "Para un futuro reconocimiento de la Fraternidad San Pío X es condición indispensable el reconocimiento pleno del Concilio Vaticano II y del Magisterio de los Papas Juan XXIII, Pablo VI, Juan Pablo I, Juan Pablo II y del propio Benedicto XVI."
Digamos que el problema no solo es canónico. Tampoco litúrgico.
Hay problemas con lo referido al Magisterio contemporáneo. Por eso creo que si no es un matrimonio roto, por lo menos es un matrimonio con desaveniencias profundas que llevarán a la ruptura. (Y ni una ni otra cosa a mi me alegran)
Estimado Padre:
Coincido con ud. en cuanto suele encontrarse dentro de las filas del lefebvrismo una dinámica o un espíritu cismático. Eso es así y por eso digo en todos los post en los que me refiero a ellos que no me gustan (en general).
Ahora, yo haría varias aclaraciones.
No es verdad que no acepten el magisterio moderno o por lo menos en bloque. He escuchado muchas alabanzas sobre algunas en particular (como la Fides et Ratio de JPII o Deus Caritas est de Benedicto). Aunque admito que la actitud general de poco respeto.
Con relación a los Blogs, no sé cuáles lee pero la mayor parte de los que yo veo más que lefebvristas son sedevacantistas (además de tener una cuadratura prominente). Pero esa es la gente que hoy lejos de reconciliarse se está separando incluso de la fraternidad. Esos son lo que se escondieron cuando Mons. Lefebvre echó a los sedevacantistas y ordenó el reconocimiento, respeto y oración constante por el Papa.
Que alguien sea católico no tiene nada que ver con su situación canónica (en rigor, ni siquiera con la comunión efectiva). La que es católica o no es la Fe en su parte dogmática, es decir que en definitiva los católicos son aquellos que creen en los dogmas enseñados por la Iglesia. El Concilio Vaticano II fue pastoral y no dogmático (como lo recuerda siempre Benedicto) por lo que los problemas que tengan con eso no los hace menos católicos. Yo admito que sin ser dogma es Magisterio importantísimo y, como tal, merece acatación (o por lo menos público respeto), ahora, también es verdad que muchas veces se lo interpreta como ruptura (ergo, dogmático) y contra ello es lo que tanto lucharon todos los Papas desde el Concilio para acá con millones de aclaraciones.
Volviendo al "espíritu cismático" que los aleja de la Iglesia hay que reconocer que este mismo espíritu está en muchísima gente que no tiene ningún tipo de problema canónico. El párroco anterior de mi parroquia decía que la adoración al Santísimo era idolatría, existen millones de confesores que dicen que la castidad en el noviazgo en anticuado, se "bendicen" uniones de divorciados y homosexuales, en todos lados se contradice expresamente la Humanae Vitae, etc. Digamos que no es un momento histórico donde la Iglesia se caracterice por la unidad, el respeto y el acatamiento no sólo del magisterio, sino también de cuestiones dogmáticas (todo ello sin entrar en el tema de los abusos litúrgicos).
Es decir, como dijo el Papa al asumir, estamos en momentos muy complicados en la historia de la Iglesia signado por el relativismo (sea este conservador o progresista) por lo que no hay que ser tan duros, me parece, con los que no se meten con los dogmas.
Perdón por lo largo.
Respetos en abundancia.
Natalio
Interesante discusión. No deja dudas el comunicado de la secretaria de estado del Vaticano, que no consideran a los Lefebvristas como parte de la jerarquia católica, ni reconocen su "sociedad" como una oficialmente inscrita en el catolicismo.
Tambien es cierto que para los seguidores de Mons. Lefebvre, estos siguen sintiendose catolicos, solo que con unas opciones que los han separado de la iglesia, por decisión propia, pues no han seguido la obidiencia al magisterio de los Santos Padres, ellos han sentido en el pasado que esta opción los acerca mas a su ideal de seguir a Jesus. A quien encuentran en la tradición y no en la novedad del Concilio.
Pero veo mucha preocupación, en algunos, en dividir lo dogmatico de lo pastoral, yo no veo tanta diferencia, pues es lo dogmatico lo que nos lleva a la forma pastoral, pero no es lo pastoral lo mas importante? y entiendo yo lo pastoral como la manera de hacer presente a Cristo aqui y ahora, los dogmas de fe, aunque aun no entiendo mucho de esto, son como aclaraciones sobre temas que eran cuestionados o que se queria evitar que cuestionaran, los Papas y los concilios han establecido estos temas y los catolicos creemos en ellos, por obediencia, pero sobre todo por Fe.
Ahora bien Que es lo mas importante? Que haya unidad, es sin duda algo muy importante, pero no una unidad, entendida esta como sometimiento a la primacia del Papa, sino una unidad que busca aunar esfuerzos en la predicacion del evangelio, donde la obediencia es importante, pues sino para que la unidad?, es necesario una guía, Jesus nos ha dejado a la Iglesia que es madre y maestra, y su cabeza en responsabilidad y servicio es el Papa, "siervo de los siervos de Dios"
Podremos siempre quedarnos discutiendo los dogmas, las cosas que nos unen o nos distancian de la iglesia, las que entendemos y aceptamos y las que nos parecen muy dificiles de entender y aun mas de aceptar, pero entonces perdidos en esas discusiones, cumpliremos la mision que tenemos como catolicos? que no es diferente que la de predicar el evangelio de Cristo, sobre todo con nuestra propia forma de conducir nuestra vida.
Veo yo al Papa, con su misión, cabeza de Iglesia, resguardando los dogmas, cuidando de los ataques constantes contra la iglesia, llevando la voz de millones que no tienen acceso a los medios, para gritar contra las injusticias y contra un mundo incredulo que hace mas grandes estas injusticias y barbaries, tratando de que los mismos cristianos no acabemos con nuestra iglesia que nos ha regalado el Padre a traves de Cristo, escribiendo para hacer una tradición de 2.000 años mas actual, pero como decia Jesus "sin cambiar la ley", que es lo que quisieran muchos, incluidos muchos catolicos. Lo veo haciendo celebraciones, que a muchos le parecen pomposas, para decirle al mundo Dios esta aqui hoy y ahora caminando en medio de ustedes. Veo al Papa junto a su cuerpo diplomatico, analizando las mejores opciones para cada diocesis del mundo, sobre a quien encargar la sucesión apostolica. Lo veo, lo siento, orando por sabiduria, por inteligencia, por mas fe, para cumplir una labor que es demasiado grande para cualquier ser humano, diria imposible, solo posible gracias a la fe y a la gracia de Dios. Lo veo junto con el resto de los catolicos y cristianos y hombres de buena fe, ser un signo de contradiccion en los tiempos de hoy.
Veo tambien al sacerdote de pueblo, de ciudad, de universidad, etc, llevando el evangelio al pueblo que le ha sido encomendado, sin diferenciar entre si es catolico o no, veo a sacerdotes y misioneros llevando el evangelio a lugares lejanos, de frontera, peligrosos donde se necesita la palabra y la fe en Dios, los veo entregando su vida en sectores y sociedad que no valoran sus esfuerzos y los ven como una amenaza y los asesinan, los persiguen, los veo tambien llevando el peso de 2.000 años de aciertos y errores. Veo a los curas hacer como San Pablo hacerse todo con todos, entender al projimo para llevarle a Cristo que es darle el verdadero sentido a la vida, a la que esta aqui y a la que vendra. Los veo ingeniarselas todos los dias sobre como predicar y seguir mas fielmente a cristo, sacerdotes, religiosos, religiosas, seglares, cada uno desde su carisma. Y asi veo muchisimas cosas en la iglesia, pero lo que mas veo, es que hay millones, sin blogs, sin opiniones, sin acceso a los medios, luchando en silencio, llevando a Cristo, ahi donde se le espera, sin descanso, sin querer nada mas sino beber de la unica fuente que les da un amor sobrenatural, devolviendo gratis lo que han recibido gratis y quiza, lo que nunca han tenido. Y pienso, sabiendo el Papa todo esto, estoy seguro, segurisimo, que quisiera ser el mas como estos sacerdotes que seguir llevando la responsabilidad que tiene en sus hombros, pero como hombre de Fe, acepta la voluntad de Dios, como Jesus "aparta de mi este caliz, pero que se haga tu voluntad".
Y vuelvo yo aqui otra vez a los dogmas, que son fuente pero no fin, y a veces nos quedamos mas en eso.
Dios nos bendiga
Daniel
Buenísimo Daniel,sin entrar en ningún detalle , aplaudo tu optimismo.¿Por qué tenemos la costumbre de estar encontrando lo negativo en todo? Dios nos ayude a ver lo bueno del prójimo, de la Iglesia, del gobierno, de la vida. Que no significa desconocer lo negativo , sino hacer crecer lo positivo por el bien de todos .
Y no puedo dejar de decir algo de MI IGLESIA , es santa , es fuerte, es incorruptible...porque SU ALMA ES EL ESPÍRITU SANTO que la mantendrá por los siglos de los siglos....Los que fallamos SOMOS LOS HOMBRES, pobres , limitados, incapaces...pero no importa porque ella no caerá y yo siempre podré refugiarme en ella ..GLORIA A DIOS POR MI IGLESIA