Ni sabio ni prudente: ¡pequeño! Jesús nos indica como ser para conocer a Dios. El pequeño no es el tonto sino el ubicado frente a Dios.
El Evangelio de Hoy según Mateo (11,25-27)
Jesús dijo:
"Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, por haber ocultado estas cosas a los sabios y a los prudentes y haberlas revelado a los pequeños.
Sí, Padre, porque así lo has querido.
Todo me ha sido dado por mi Padre, y nadie conoce al Hijo sino el Padre, así como nadie conoce al Padre sino el Hijo y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar."