Las veo desde mi ventana. Se han juntado como para tomar coraje y comenzar a desandar el largo camino hacia el norte. Son casi las últimas que están quedando en este otoño que recien comienza...
Siempre me impactó esto de que las golondrinas sean aves de verano. Emigrando de norte a sur... y viceversa... no conocen los rudos frios invernales nada más que de oídas. Y allí están... en la antena que está a unos 100 metros de mi ventana (por eso la foto es todo lo mejor que mi rudimentaria cámara me lo permite).
Vivir es partir
Las estaciones van pasando. Hoy ya estamos transitando el otoño... rumbo al invierno. El tránsito de los minutos es inexorable... mientras que la nieve se va amontonando en nuestras sienes.
Vivir es caminar sin volver atrás. Tal vez hagamos uso de la memoria para traer al presente lo que ya hemos transitado... pero lo que paso fue. No vuelven ni los seres queridos ni los buenos o malos momentos... todo es un lento transcurrir... un devenir suave e inexorable. Las golondrinas parten buscando el calor del norte... nosotros el invierno de la ancianidad... todos caminamos... partimos... buscamos el futuro. ¡Ojo!, el futuro cercano se llama invierno pero el futuro total es la plenitud de la Morada que el Triunfante del invierno nos está preparando... eso sí... antes hay que transitar el invierno.
Una poesía para este otoño
No es mía. Es de Leopoldo Lugones. Dice así:
El amor eterno
Deja caer las hojas y los días
una vez más, segura de mi huerto.
Aun hay rosas en él, y ellas, por cierto,
mejor perfuman cuando son tardías.
El deshojarse en tus melancolías,
cuando parezca más desnudo y yerto
ha de guardarte bajo su oro muerto
violetas más nobles y sombrías.
No temas al Otoño, si ha venido.
Aunque caiga la flor, queda la rama.
La rama queda para hacer el nido.
Y como ahora al florecer se inflama,
leño, seco, a tus plantas encendido,
ardientes rosas te echará en la llama.
No. No estoy deprimido. Es que el sábado cumplo cincuenta... me estoy despidiéndo de los cuarenta... el otoño hoy es mi amigo.
Si. ¡Vivir es partir deshojando rosas y suspirando por lo pleno!
Hermosa poesía, la tomo prestada, yo también me estoy despidiendo este año...
Y por cierto Que los cumplas muy feliz!! por los 50 bien vividos, y por otros 50 mas! Bendiciones