Para nosotros que no entendemos nada del asunto. Y que, como buenos argentinos, pensamos que es cosa de Europa y Estados Unidos. A lo sumo de Brasil... pero a nosotros no nos roza ni de cerca. O la estamos piloteando tan bien que padeceremos sus consecuencias de manera muy leve.
Les debo confesar algo: no entiendo nada de nada sobre como funcionan la economía y los sistemas económicos. Todo eso ha sido, y es, para mí algo así como una escritura en chino. No me interesó y por eso prácticamente no leí nada. Así que cuando escucho hablar sobre estas cosas presto atención, aunque no logro captar todo lo que se dice. Por que en economía los matices son muy importantes.
Por eso me encantó este "cuento" que leí en el Blog de Abel. No es de él sino que está circulando por la red. Se lo copio de allí.
La crisis financiera explicada de manera sencilla
Heidi es la propietaria de un bar en Berlín, que ha comprado con un préstamo bancario. Como es natural, quiere aumentar las ventas, y decide permitir que sus clientes, la mayoría de los cuales son alcohólicos sin trabajo, beban hoy y paguen otro día. Va anotando en un cuaderno todo lo que consumen cada uno de sus clientes. Esta es una manera como otra cualquiera de concederles préstamos.
Muy pronto, gracias al boca a boca, el bar de Heidi se empieza a llenar de más clientes.
Como sus clientes no tienen que pagar al instante, Heidi decide aumentar los beneficios subiendo el precio de la cerveza y del vino, que son las bebidas que sus clientes consumen en mayor cantidad. El margen de beneficios aumenta vertiginosamente.
Un empleado del banco más cercano, muy emprendedor, y que trabaja de director en la sección de servicio al cliente, se da cuenta que las deudas de los clientes del bar pueden considerarse como respaldo al crédito de Heidi, y decide aumentar el monto del préstamo que le conceden. El empleado del banco no ve ninguna razón para preocuparse, ya que el préstamo bancario tiene como base para su devolución las deudas de los clientes del bar.
En las oficinas del banco los directivos convierten estos activos bancarios en “bebida-bonos”, “alco-bonos” y “vomita-bonos” bancarios. Estos bonos pasan a comercializarse y a cambiar de manos en el mercado financiero internacional. A nadie le interesa en realidad qué significan los nombres tan raros de esos bonos; tampoco qué garantía tienen estos bonos, ni siquiera si tienen alguna garantía o no: Los emitió un banco importante! Como los precios siguen subiendo constantemente, el valor de los bonos sube también constantemente.
Sin embargo, aunque los precios siguen subiendo, un día un asesor de riesgos financieros que trabaja en el mismo banco – al que, por cierto, van a despedir pronto a causa de su pesimismo injustificado – decide que ha llegado el momento de demandar a Heidi el pago de su préstamo bancario; y Heidi, a su vez, exige a sus clientes el pago de las deudas contraídas con el bar.
Pero, claro está, los clientes no pueden pagarlas.
Heidi no puede devolver sus préstamos bancarios, entra en bancarrota y pierde el bar.
Los “bebida-bonos” y los “alco-bonos” sufren una caída de un 95 % de su valor. Los “vomito-bonos” van ligeramente mejor, ya que sólo caen un 80 %.
Las compañías que proveen al bar de Heidi, que le dieron plazos largos para los pagos y que también adquirieron bonos cuando su precio empezó a subir, se encuentran en una situación comprometida. El proveedor de vinos entra en bancarrota, y el proveedor de cerveza tiene que vender el negocio a otra compañía de la competencia.
El gobierno interviene para salvar al banco, tras conversaciones entre el presidente del gobierno y los líderes de los otros partidos políticos.
Para poder financiar el rescate del banco, el gobierno introduce un nuevo impuesto muy elevado que pagarán los abstemios.
También los invito a visitar su blog dónde podrán leer sus comentarios sobre el tema y los comentarios que han dejado sus lectores. Allí aparecen matices sobre el tema.
Cuando en enero nos venga la boleta de la luz (entre otras) más cara vamos a comprender que la crisis de los países del norte es también nuestra crisis. Y vamos a poder entender algo más acerca de lo que significa subsidiar el consumo y la deuda externa. Pero estos son temas que me exceden en mi limitada capacidad de análisis económico.